El aprendizaje en línea es una experiencia diferente a la instrucción tradicional en el aula, y algunos estudiantes pueden necesitar hacer algunos cambios en su rutina académica normal para adaptarse adecuadamente. Así es cómo los padres pueden ayudar a sus hijos a aprovechar al máximo el aprendizaje en línea.
Consistencia.
Al igual que con cualquier forma de instrucción, el aprendizaje en línea funciona mejor con un horario constante. Asegúrese de que sus hijos cumplan con los requisitos de asistencia diaria a las clases en línea y anímelos a completar sus tareas todos los días. Tener un espacio de tiempo dedicado para la tarea proporciona consistencia en el horario de un estudiante, y esta rutina puede mantenerse cuando se reanude la asistencia tradicional al colegio.
Debido a la falta de estructura diaria por no asistir físicamente a clases, muchos estudiantes requerirán apoyo adicional para mantenerse enfocados. Los padres pueden brindar este apoyo dándoles recordatorios amistosos durante el día y ofreciéndose para ayudar a planificar un horario. Si su hijo está trabajando con un tutor, también recomendamos establecer una hora y un día recurrentes para ayudar a los estudiantes a mantenerse encaminados.
Proporcione un ambiente tranquilo.
Muchos padres han descubierto que uno de los mayores desafíos del aprendizaje en línea es lidiar con el hecho de que nuestros hogares son espacios compartidos. Siempre que sea posible, trate de brindarle a su hijo un ambiente tranquilo para trabajar, idealmente libre de distracciones y otros dispositivos electrónicos. Dado que los estudiantes pueden estar conectados durante algunas horas a la vez, es posible que la sala de estar no sea el mejor lugar para que asistan a clases en línea. Recomendamos a los estudiantes que configuren su espacio de trabajo con anticipación para asegurarse de que no haya sorpresas.
Anímelos a hablar.
Con el aprendizaje en línea, a veces puede resultar más difícil para los niños comunicarse con sus profesores cuando algo no tiene sentido. Este puede ser especialmente el caso de las aulas virtuales: en el colegio normal, pedirle aclaraciones al profesor es tan simple como levantar la mano. En un entorno en línea, los estudiantes pueden sentirse intimidados o avergonzados cuando le piden a su profesor que detenga la lección y vuelva a explicar algo que no estaba claro.
En lugar de hablar con sus profesores después de la clase como lo harían normalmente, los estudiantes ahora se encuentran contactando a sus profesores a través de correos electrónicos escolares y funciones de mensajería integradas en las plataformas de aprendizaje en línea. Aunque se siente diferente, anime a sus hijos a que traten su experiencia de aprendizaje en línea de la misma manera que lo harían en el colegio normal. Recuérdeles que sus profesores todavía están allí para ayudarlos y que no deben dudar en comunicarse si algo no tiene sentido.
Regístrese para recibir tutoría en línea.
Los padres también deben considerar que sus hijos trabajen con un tutor en línea. Uno de los principales beneficios de la tutoría privada es contar con la atención exclusiva del instructor. Con la tutoría uno a uno, el aprendizaje se impulsa al ritmo del estudiante. Muchos estudiantes se sienten más cómodos pidiendo una aclaración cuando trabajan con una sola persona que puede desempeñar el papel de un entrenador académico personal.
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fuente: TutorDoctor